Will Grayson tiene dos reglas en la vida: callar y no implicarse en nada. Sin embargo, su mejor amigo, Tiny Cooper, está decidido a buscarle novia y a montar su musical autobiográfico: Tiny Dancer. Muy cerca de él hay otro Will Grayson: un chico melancólico que no tiene nada bueno a lo que agarrarse. Lo único que hace que su vida merezca la pena es su relación online con Isaac, al que nunca ha visto en persona. 

Una fría noche de invierno, los dos Will Grayson se cruzarán en una esquina cualquiera de Chicago. Por suerte para ambos, Tiny está decidido a empujarlos hacia la felicidad, el amor y, por supuesto, el musical más fabuloso jamás representado en un instituto (Psinopsis de la editorial).

Los dos personajes principales (y narradores) de la historia son los dos Will Grayson. Son aparentemente muy diferentes no sólo en la forma de ver el mundo sino también en su forma de escribir (supongo que es simplemente una forma de evitar confusión en los lectores). Tengo que decir que sólo he llegado a conectar realmente con uno de ellos (el amigo de Tiny). En realidad no sólo me gustó más sino que también fueron también los personajes que orbitaban a su alrededor los que más me gustaron puesto que parecían más reales y complejos. En cuanto al segundo Will me pareció más infantil (o demasiado adolescente mejor dicho) y no me acabó de convencer. Además sus amistades me parecen muy surrealistas. 

Como he comentado antes, la novela está escrita desde el punto de vista de ambos Will Grayson. Los capítulos van cambiando de narrador y en cada uno de ellos la historia la explica uno de los dos Wills. Un aspecto curioso es que mientras que un Will escribe correctamente el otro lo hace sin mayúsculas, como si estuviese escribiendo en diario o en algún soporte muy informal y personal. Ya este aspecto caracteriza mucho a cada uno de ellos, y les da un toque muy personal.

He dicho al principio que no tenía puestas en esta novela demasiadas expectativas. Es cierto, soy un gran admirador secreto de John Green (secreto porque no lo suelo gritar a los cuatro vientos) y el hecho que compartiera espacio creativo con un autor que nunca había leído (aunque sí tenía buenas referencias de él) me asustaba un poco. No sabía si me iba a gustar la forma de escribir o si la estructura de la historia iba a coincidir más o menos con la forma y el estilo de John Green. Es cierto que me ha sorprendido en la forma, pero muy positivamente. Creo que le da una tridimensionalidad muy necesaria a los personajes y a la historia en general.

En cuanto a la historia que aquí se nos presenta tan sólo tengo buenas palabras. Tiene toques de humor que me han hecho reír mucho, tiene detalles muy bonitos que me han hecho sacar una lagrima y  en muchos otros aspectos me ha emocionado. Sinceramente poco le podría pedir a esta novela.

Recomiendo mucho esta novela, no sólo por la calidad de los autores o por lo entretenida que es la historia sino por mucho más. Por sus valores, por lo que pretende transmitir y porque maldita sea hacen falta muchas más novelas que normalicen las relaciones homosexuales en la literatura. Esta es una de ellas así que hay que leerla.

Muchas gracias a Fanbooks por hacernos llegar esta novela. Me ha encantado y espero que algún bibliómano la lea y nos lo haga saber. Y si ya la habéis leído, queremos que nos deis vuestra opinión.

Aaaadéu!!!!!,

Àlex