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cumpleaños Felicidades Noe

Cómo la filosofía me ayuda a entender lo que siento por Noèlia

abril 08, 2015La tauleta de nit



Cuenta la mitología que cuando nació Afrodita, los dioses celebraron un banquete para celebrarlo. Entre ellos se encontraba Poro. Cuando acabó la comida llegó Penia con la intención de mendigar todo lo que pudiese de las sobras de aquel banquete divino. Poro, paseando por el jardín de Zeus —el anfitrión— con su embriaguez a causa del néctar, cayó dormido entre los arbustos. Fue entonces cuando Penia, aprovechando la ocasión y con el objetivo solventar su falta de recursos, se acuesta con él y concibió al Amor.

Así es, más o menos, cómo Platón explica y justifica la existencia de algo tan extraño como el Amor. Puede parecer un cuento mitológico cualquiera pero es mucho más, de la misma manera que nuestra historia es mucho más que una historia para mí. Lo que pretende este pequeño relato más allá de la mera anécdota ficticia del engendramiento del Amor es intentar entender el amor en todos sus aspectos.

Por una parte justifica que el Amor sea un fiel servidor de Afrodita, ya que fue engendrado en la fiesta de su nacimiento. Además se entiende así que el Amor es enamorado a su vez de la belleza, porque es Afrodita bella. Quizá esto no te interesa demasiado porque el efecto sigue estando demasiado relacionado con la mitología pero espera un segundo y a ver qué te parece el resto.

El Amor, por ser hijo de Penia (la pobre que mendigaba en la fiesta del nacimiento de Afrodita), está condenado a ser siempre pobre, a carecer de algo para poder ser feliz. El Amor también es seco y miserable, descalzo, sin un techo en el que refugiarse y sin un lecho en el que dormir; está condenado a dormir siempre en el suelo. Con respecto al padre, el Amor es siempre inconformista, buscador de la belleza y las grandezas de la vida. Es cazador del conocimiento y de las pasiones. Es sofista, es valeroso. Vivo en todos los aspectos. Pero no es inmortal ni mortal. Un día puede tener la vitalidad de un dios y marchitarse al día siguiente como la "rosa mutabile" de Federico García Lorca.

Por esa razón, el Amor nunca carece de recursos, pero tampoco es rico. Está en medio de la sabiduría y la ignorancia. Y a partir de aquí la cosa se complica bastante pero esto me basta para explicarte lo que siento por ti.

Soy siempre pobre cuando estoy sin ti. Estoy totalmente perdido, sin un techo en el que refugiarme de los males del mundo; sin hogar, sin patria ni intelecto. Sólo cuando estoy contigo, sé que estoy donde debo estar. Mi hogar está donde tú estás, en ningún lugar más del planeta, mi lengua en la que me hablas tú y mi refugio tus abrazos. Cada día que paso sin ti, es casi un día perdido, porque eres tú la que me motivas a seguir adelante en todo lo que hago.

Muchas felicidades y espero que este texto te haya sacado una sonrisa. Si lo hace, ya habrá cumplido su objetivo.

Y ahora quiero terminar como he empezado, voy a hacer unos últimos símiles filosóficos (lo siento no lo puedo evitar). Lo primero que quiero que sepas es que si en el mito de la caverna el Sol es lo que da lucidez al mundo, a las ideas, si es la idea de las ideas, tú eres mi Sol. Pero no quiero decir mi Sol en plan cursilada, sino que eres mi Sol platónico (bueno sigue sonando cursi pero es cierto).
Una de las problemáticas que planteó Wittgenstein fue la de si las cosas son realmente tal y como las percibimos. Pues yo te puedo asegurar que por lo que hace a mi persona no. Cuando tú no me percibes sensiblemente, no soy absolutamente nada.

Te quiero mucho y espero que sigas cumpliendo muchos años más a mi lado (no es en plan Ausias March eh). Eres todo lo que tengo, mi única confidente, y lo sabes.

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